Gatito encerrado en la crisis del agua

Columnómetro de Aquiles Baeza.

1.- Cuando creíamos haberlo visto todo, sucede que la crisis inducida del agua en la CDMX ha escalado a niveles inimaginables.

Además del cierre intencional de válvulas de agua en seis delegaciones de la CDMX, hay evidencias del despliegue de una campaña negra vía telefónica en la que acusan a gobiernos delegacionales de ser los responsables del desabasto del agua.

Que se está haciendo uso político del desabasto intencional del agua en la CDMX es más que obvio. Y que en esta guerrita absurda están confrontados el PRD y Morena, también. Y salpican al PAN.

La novedad es que se ha desplegado una campaña negra de mensajes masivos vía telefónica.

Los mensajes que suponemos se envían desde centrales contratadas –Call Center- llegan a los números telefónicos particulares de los capitalinos.

Sin ni siquiera un saludo de por medio, una grabación advierte: “Detrás de la crisis del agua en la Delegación Benito Juárez está el PAN”.

En el breve mensaje que sigue con un “no te dejes engañar”, afirma que la escasez del agua se remonta a la gestión del delegado Jorge Romero Herrera y los panistas que no invirtieron en la red de agua”. Zaz. Hasta ahí el mensaje. Y ni siquiera se despiden.

Para los observadores acuciosos, aquí hay gatito encerrado.

En la Delegación Benito Juárez ha habido siete gestiones panistas y antes de la de Romero, cinco.

La campaña negra del agua y su extensión vía telefónica no es obra de la casualidad y se necesitan recursos técnicos, humanos y económicos para hacerlo.

Ahora sucede que los capitalinos estamos a merced de las estrategias políticas absurdas de los partidos. Se pasan.

2.- A cuatro meses de las elecciones, los partidos utilizan el recurso más ruin para conseguir votos, el manejo político del agua. Por primera vez se habla de “grupúsculos políticos” responsables del cierre intencional de válvulas de agua que ha afectado a miles de capitalinos.

Contra los señalamientos del gobierno capitalino y la denuncia penal que levantó la diputada Elizabeth Mateos en la que implica a activistas de Morena, la respuesta de los aludidos es peor porque minimizan el cierre de 50 válvulas cuando hay 300 en la ciudad y acusan al gobierno de Miguel Ángel Mancera de no atender un problema que lleva años sin resolver.

A los capitalinos sólo nos queda llenar nuestros tambos de agua y reclamar ¿y nosotros por qué?

3.- Lo que faltaba, ONG bajo sospecha.

Los sudcalifornianos recibieron como cubetada de agua helada las conclusiones del reporte que emitió el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal que ubicó al destino turístico de Los Cabos como la ciudad más violenta del mundo.

Sin considerar que en el ranking de las 50 ciudades más violentas del mundo no figuran ciudades de Michoacán, Veracruz o Jalisco, la ONG también incluye a La Paz, entre los 10 centros urbanos más violentos, los que equipara con plazas de Venezuela y Brasil.

El caso es que salió a relucir una investigación que publicó hace unos años Proceso en la que da cuenta que José Antonio Ortega Sánchez fue expulsado -o invitado a salir- de México Unido contra la Delincuencia por manipular información con fines políticos.

Mientras son peras o manzanas, hoy Ramón Ojeda Mestre encabeza varias mesas de análisis entre hoteleros de BCS, para mostrar que las conclusiones de Ortega Sánchez están fuera de contexto. ¿Qué no?

4.- Los juzgadores no tienen más jefes que el orden jurídico

Parece choro pero no lo es. La cultura de la legalidad y el cumplimiento de la Constitución son condiciones sustanciales para el Estado de Derecho. Estas definiciones vienen a cuenta por lo señalado por el titular de la Corte y del Consejo de la Judicatura Federal, el ministro Luis María Aguilar Morales, en el sentido de que los juzgadores federales tienen la responsabilidad de preservar la libertad, garantizar la convivencia en paz y la consolidación del Estado de Derecho.

Esto implica, que no tienen jefes ni responden a intereses ajenos al orden jurídico. Esto seguramente lo dijo por aquellos que todavía piensan que sigue siendo válida aquella célebre frase atribuida a Piporro “With money dancing dog”.

Por cierto que en la conmemoración del Día del Juzgador se reconoció el desempeño del ministro José Fernando Franco González Salas, así como del ministro en retiro Sergio Salvador Aguirre Anguiano, entre otros.

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