Insólito, el rector de Unison gana más que la gobernadora pero no se refleja en la calidad educativa
|El actual rector de la Unison, cobra 141 mil pesos al mes y la gobernadora 78 mil 880.75 pesos, de acuerdo a datos oficiales.
Los elevados salarios de los directivos de la Unison no se traducen en mejoría educativa para los estudiantes; sólo tres de cada diez terminan la carrera.
En una entrevista al Diario La Verdad de Hermosillo, Sonora, la aspirante a la Rectoría de la Unison, Etty Estévez Neinninger, va directo a uno de los temas más oscuros en las máxima casa de estudios y lanza: «el rector no debe ganar más que la gobernadora del estado».
Por ello plantea reconfigurar el presupuesto para privilegiar el gasto en las funciones clave de la Universidad de Sonora, como los proyectos para educación virtual.
En la amplia entrevista realizada por la reportera Alicia Félix, la académica puntualiza que «reducir los sueldos de los altos puestos de la Universidad de Sonora será de las principales tareas en realizar en caso de obtener el puesto de rectora».
Etty Estévez Neinninger advierte que aumentar la matrícula estudiantil debe ser el objetivo de toda universidad pública, pero de manera simultánea debe trabajarse en programas para mejorar la calidad educativa, lo que equivale a tener más y mejores graduados. Pero para ello se requiere de mayor presupuesto.
— ¿Qué propone para adelgazar la estructura de la administración de la Unison que a todas luces es obesa y burocrática?, preguntó LA VERDAD.
— Bajar sueldos de los altos directivos; el rector no puede ganar más que la gobernadora. Bajar gastos administrativos, es decir, reconfigurar el presupuesto para privilegiar el gasto en las funciones sustantivas de la Unison, como serían los proyectos para educación virtual y para la transferencia de conocimiento a la sociedad.
Los números hablan por sí solos. De acuerdo a datos obtenidos de la oficina de Transparencia, el tabulador de la Secretaría de Hacienda estatal muestra un sueldo de la gobernadora de 70 mil 880.75 pesos mensuales, mientras que el rector Heriberto Grijalva casi lo duplica pues cobra 141 mil pesos al mes.
El tema en si mismo forma parte de una polémica que se ha generado en torno a la máxima casa de estudios en Sonora, sobre todo por las recientes investigaciones que realiza la Fiscalía Anticorrupción sobre el manejo de recursos de la actual administración, derivada de una denuncia del Sindicato magisterial.
El relevo en la Rectoría de la Unison tiene un especial significado porque no es un secreto que durante años ha sido manejada en los términos de lo que se conoce como la «onda grupera», pues la carga política ha dificultado el desarrollo eminentemente académico.
Estévez está convencida de que «la Junta Universitaria podría fomentar mayor participación de los universitarios en las decisiones sobre el quehacer de la Universidad», aunque para ello «es necesario una reforma a la Ley Orgánica que permita a los universitarios sentirse mejor representados».
Ante las suspicacias de que los aviadores son un problema real en la Unison, Estévez dice que es necesario realizar una investigación a fondo y «ser muy exhaustivos para dimensionar bien el problema y, partiendo de eso, eliminar totalmente toda práctica que genere ineficiencia en el manejo de recurso material y humano».
Con propuestas claras de cambio, Estévez descarta la continuidad como sello: «Propongo un proyecto con cambios sustanciales. Las acciones del actual rector ya cumplieron un ciclo que proyectamos hace 20 años aproximadamente. Es momento de planear a 20 años de nuevo, buscando privilegiar las mejoras en el perfil de nuestros egresados.»