Los otros candidatos

Apenas concluya el periodo tradicional de los días de guardar y estaremos de lleno en la dimensión desconocida de las campañas electorales.

Y decimos dimensión desconocida porque en ésta veremos desfilar candidatos que nunca hubiéramos imaginado y que una de dos, o le acercan votos a los presidenciales o se convierten en lastre y se los quitan.

Desde luego que nadie critica o cuestiona el origen de los candidatos, porque tenemos de todo como en botica y de acuerdo a la Constitución los mexicanos tenemos derecho a votar y ser votados, pero en algunos casos se pasan.

Los dirigentes partidistas deben asumir el costo de sus decisiones que ha llevado a que muchos suspirantes cambien de cachucha y camiseta como cambian de cal… cetines. Por eso, que luego no se quejen de que sus abanderados no salieron tan buenos como lo esperaban. Que conste.

Además de futbolistas, actores y actrices y hasta de una presentadora del clima en televisión que va de candidata al Senado, tenemos candidatos hijos de ex gobernadores, la esposa de un ex gobernador y sobre todo, candidatos camaleones que lucen un color de partido según la ocasión.

Chiapas. El candidato del PRI, Roberto Albores Gleason, hijo del ex gobernador Roberto Albores Gillén fue una decisión que dobló el entusiasmo del PVEM pues empujó varias renuncias, la del verde Eduardo Ramírez Aguilar que se fue a Morena y la del ex priista Antonio Aguilar Bodegas hoy candidato a gobernador por el PAN. Es posible que el Manuel Velasco pida licencia para ir de candidato al Senado y entonces el apoyo a José Antonio Meade sea menor al que esperaban.

Tabasco. La verdad es que nadie sabe cómo va a terminar esta historia. El mano a mano será entre Adán Augusto López, por Morena, quien como AMLO lleva todo el tiempo haciendo campaña y por el PRD, Gerardo Gaudiano Rovirosa, hijo del ex góber Leandro Rovirosa, y que tiene una calificación a secas.

El PRI fue un desastre y las desbandadas estuvieron al día, por eso la candidata Georgina Trujillo, también hija del ex góber, Mario Trujillo, no le garantiza muchos votos a Meade.  La desbandada fue tan fuerte que Ady García, priista con 35 años de militancia, aceptó ir por la alcaldía de Centro pero por el PVEM

Yucatán. Se trata de las contadas plazas donde el PRI, por obra de Rolando Zapata, pueden retener. Mauricio Sahuí es marca Zapata no Ochoa y esa es gran diferencia. El panista Mauricio Villa se ve en tercer lugar y por tanto no le ayudará mucho a Ricardo Anaya. Por Morena Joaquín (Huacho) Díaz no le dará mucho a AMLO aunque se lo piratearon del PAN.

Veracruz. Va por la alianza PAN-PRD-MC, Miguel Ángel Yunes Márquez, hijo de Miguel Ángel Yunes Linares (Maylin), pero no se ve que Anaya esté muy entusiasmado. Hace unas semanas Maylin dijo que los veracruzanos no votarán por ningún domador que amenaza con soltar al tigre (de papel), tampoco por el candidato que acusa a otro de ser el más rico (Meade contra Anaya) y menos por quien más denuncias presente contra el presidente de la República, ¿Anaya?

El punto es que Anaya se le vio más entusiasmado cerca del candidato al gobierno de Guanajuato. Por Morena va en segunda vuelta Cuitláhuac García y después podría buscar una tercera oportunidad.

Puebla. Martha Érika Alonso no es hija de ex góber, pero si esposa de Rafael Moreno Valle. Esta plaza los panistas la ven sin problemas y como generadora de votos para Anaya. Este es un problema para los sentimientos de Luis Miguel (Luismi) Barbosa que podría quedar chiflando en la loma. Por el PRI va solitito Enrique Doger, quien aunque quiera no le dará muchos votos a Meade. Y hay otros tiradores de menor peso.

Morelos. Será una elección legendaria. Va el hijastro de Graco Ramírez, Rodrigo Gayosso Cepeda, de quien sus detractores dicen que puede presumir la herencia de un crecimiento del 445 por ciento, pero de deuda interna en el estado. La verdad es que con Cuauhtémoc Blanco, no se ve que la entidad dará el salto al primer mundo. Jugarán ocho candidatos y cómo estarán las cosas que ni el abanderado del PRI ni el PAN brillan en sociedad.

Guanajuato. Es otra plaza que el PAN tiene segura, con Diego Sinhué Rodríguez Vallejo, pero por la gestión de góber de las charamuscas, Miguel Márquez Márquez. Lo curioso es que Anaya se siente más en confianza en Guanajuato que en Querétaro y espera colgarse de esos votos. Morena le hizo la jugada de piratearse al ahora ex panista Ricardo Sheffield, y para eso bajó a Antares Guadalupe Vázquez a quien le dieron premio de consolación. Aunque quede en segundo lugar, Sheffield no tendrá muchos votos para ya saben quién.

Jalisco. Hubo tantas manos del PRI en ese proceso interno que las desbandadas fueron la consecuencia. Miguel Castro Reynoso, gente de Aristóteles Sandoval, no tendrá una campaña tersa como esperaba ni generará tantos votos como espera Meade. La operación fue de Ochoa. A Enrique Alfaro se le ve nervioso y por eso ya apuró un mega arranque de campaña para el 1 de abril. Morena aprieta pero su candidato Carlos Lemelí es un personaje que espera que Marcelo Ebrard le haga el milagro.

CDMX. El mano a mano en el territorio chilango, como ya se sabe, estará entre Alejandra Barrales y Claudia Sheinbaum. Anaya le tiene sus veladoras prendidas a Miguel Ángel Mancera para acepte ir de pluri al Senado y le ayude con votos en la campaña. En esta plaza Mikel Arriola se perfila para el tercer lugar, no es sorpresa, con una votación muy modesta para Anaya.

Hoy lo importante es que tenemos los tradicionales días de guardar y seguro nadie se acordará de candidatos ni políticos de temporal. A propósito, esta columna reaparecerá hasta el 2 de abril. Disfruten sus vacaciones.