Apuntes de campaña: entre memes y casos para la araña

Las campañas electorales están para reír o para llorar según se vea, pero esto es lo que somos.

A lo largo de las campañas, precampañas, ante campañas, casi campañas y demás variaciones sobre el mismo tema, los candidatos presidenciales han ido incorporando personalidades –algunas por demás sui generis por no decir extrañas o barrocas- para ganar seguidores, adeptos o fieles que esperan se conviertan en votos.

Pero aunque hay aciertos, sin duda, la presencia de personajes incómodos ha generado escándalos en redes sociales en lugar de detonar apoyos, y en algunos casos, por no preguntar han bateado públicamente al candidatazo.

El caso más sonado es el malogrado destape de la internacionalista Alicia Bárcena como representante de ya saben quién ante la ONU. La nota se hizo polvo y dejó mal parado a quien lo presumió cuando recibió vía tuit un sentido agradecimiento junto con un balde de agua fría pues como secretaria técnica en la CEPAL el cargo le «obliga a garantizar la neutralidad ante cualquier proceso electoral». Zaz. ¿Qué no le preguntaron?

Hay que hacer un poco de memoria para repasar los episodios, muchos incómodos, en los que los personajes de apoyo no han dado los resultados esperados. Y han dado rienda suelta a memes de dulce, chile y de manteca.

Si bien el anuncio de que Ernesto Cordero le daría su voto a José Antonio Meade los opositores lo tomaron como algo ya esperado, el llamado de la senadora Geli Mouriño para votar a favor de #YoMero llamó la atención por tratarse de la madre del ex secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño (qepd). Órale.

Ello contrastó significativamente con la incorporación de Abraham González Uyeda, ex subsecretario de Gobernación con Mouriño, quien se hizo famoso por prestar su rancho para el destape de Felipe Calderón y ahora alineado con ya saben quién. Ouch.

Aunque los personajes del espectáculo siempre han formado parte de las ofertas en el Congreso -quién puede olvidar a Ignacio López Tarso, Silvia Pinal, Irma Serrano (La Tigresa) y recientemente Carmen Salinas-, hoy esta oferta también es para jalar votos.

¡Lás-ti-ma Margarito!, es el sello que trae Ausencio Cruz rumbo a la Cámara de Diputados. ¿Sabe usted por qué distrito y cuáles son sus propuestas?

Pero hay otros casos que han sacudido literalmente a las redes sociales.

Belinda es una estrella cien por ciento influencer y vaya que no recordábamos que en 2015 publicó tuits respaldado a los candidatos verdes, si a los del PVEM. Al final del segundo debate de los presidenciables Belinda dio el giro dejó la mafia del poder y se transformó en Amlover, así dicen en redes.

«Cada quien con sus decisiones, yo respeto» dice Aquiles Baeza, el caso es que Belinda desató tal polémica que aunque la cantante y modelo aseguró que no buscaba seguidores, ciertamente los perdió en Twitter al pasar de 7.51 a 5.54 millones.

Otro tema. Aunque sus críticos intentaron hacerlo pinole, el caso de Eugenio Derbez fue distinto. Todo comenzó con una declaración en la que reconoció que no creía que AMLO fuera la mejor opción. Eso bastó para que se le fueran a la yugular los seguidores de ya saben quién.

Y los ejércitos de bots se agarraron de una entrevista con Adela Micha para sacarle de contexto reflexiones que hizo sobre los millennials. Lo atacaron de mil maneras en redes sociales e intentaron boicotear su película. Pero qué creen, “Hombre al agua”, el filme de Derbez rompió récord en las salas cinematográficas a las que asistieron 4.3 millones de espectadores en una semana y recaudó poco más de 219 millones de pesos. Un éxito, y no de peluche, pues. Óigame, no.

En el inter el astronauta Rodolfo Neri Vela se metió en los hoyos negros de la política, retuiteó un meme en el que se comparó con Eugenio Derbez pero le salió el chirrión por el palito. Vaya, hasta el reconocido actor Gael García Bernal le pidió hacerse responsable de lo que publica pues flaco favor le hace a AMLO decir que su opinión vale más que la de un comediante. Sopas.

En el extremo, entre los candidatos que han vivido de la patada, Cuauhtémoc Blanco aprendió a abrir la boca sólo cuando es necesario. El fin de semana el TEPJF validó su candidatura al gobierno de Morelos y vaya que todo puede ocurrir.

Pero no es el caso del ex portero Adolfo Ríos, candidato en Querétaro pues demostró que aunque es muy popular le hace falta asesoría. En el debate entre candidatos el ex americanista y ex puma, insistió que gobernará con sentido común pero le ganó el odio y rencor social:

“Hay muchos que tienen una maestría, bien por ellos, pero si entramos a este proyecto es porque no lo han sabido hacer bien, porque los que más saben son los que más roban”. Conste, así lo dijo.

Los casos para la araña, dignos de The Twilight Zone o La dimensión desconocida, no nos han faltado.

Que alguien nos diga quién se hubiera imaginado a Ricardo Anaya, dirigente nacional del PAN, como orador oficial en la conmemoración del 29 aniversario del Partido de la Revolución Democrática (PRD). ¿Y qué, cuando cumpla tres décadas el sol azteca el orador será Javier Corral. Es pregunta para Los Chuchos.

Pago por evento. Seguro que nadie imaginó a Germán Martínez Cáceres y a Manuel Espino en un duelo público para ver quien hablaba mejor del candidato presidencial de Morena. Nada explica el cambio de cachucha, pues incluso muchos recuerdan todavía cuando Germán Martínez escribió un artículo en 2014 celebrando la muerte de Lázaro Cárdenas para defender la reforma energética, aunque usted no lo crea.

De Espino, que presume traer al Yunque bajo el brazo, diremos que es otro misterio para la araña.

Lo más calientito tiene que ver con Santiago Nieto Castillo quien navegó durante años con la bandera del Castillo de la Pureza, aunque era asesor del PRD, se convirtió en titular de la Fepade y desde ahí armó los misiles contra Emilio Lozoya Austin en el caso Odebrecht. La PGR lo destituyó y declaró a diarios extranjeros que temía por su seguridad y que intentaron comprarlo. Hoy está en el rebaño sagrado al que siempre perteneció.

Otro tema absolutamente memeable fue el de Chiapas, pues en el límite del tiempo legal, Manuel Velasco movió sus fichas y descobijó a Roberto Albores Gleason para lanzar a Fernando Castillo Cal y Mayor como el tucán dorado.

En el Segundo Debate entre presidenciables además del abrazo que el Bronco pidió a AMLO para Meade y Anaya -y que nunca ocurrió- y el juego de cuídame la cartera quedaron como anécdotas. Lo mismo cuando Meade le dijo a López Obrador que el caso de Nestora Salgado quedaba en su conciencia, no hubo una sola palabra del tabasqueño para defenderla. “Ni me retracto ni me disculpo”, respondió Meade a las airadas protestas de la ex integrante de la llamada policía comunitaria.

Otro caso para la araña es el del único líder sindical que opera a control remoto, nos referimos a la de Napito, que siguen analizando en el Tribunal Electoral Superior cuando apenas falta un mes para las votaciones.

o.o.o.o.

Ilustración: Figurilla artesanal de Colima. Museo Nacional de Antropología.

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